"En estos últimos días nos ha hablado por medio de su Hijo, a quien constituyó heredero de todas las cosas, y por quien también hizo los mundos; el cual, siendo el resplandor de su gloria y la imagen misma de su persona, y sosteniendo todas las cosas con la palabra de su poder, después de haber purgado por sí mismo nuestros pecados, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas;" RV - Hebreos 1:2, 3 KJV
Esto revela que Cristo no sólo es nuestro salvador sino también nuestro creador; que él no solamente creó nuestro mundo sino todos los otros mundos también; y que él es uno con el Padre. Es por esta razón que “Dios (el Padre) dijo (al hijo), Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza” - Génesis 1:26. Y mientras el Movimiento del Éxodo estaba a pie, “todos bebieron la misma bebida espiritual; porque bebían de la roca espiritual que los seguía, y la roca era Cristo”. 1ª Corintios 10:4
“…Hay un Dios personal, el Padre; hay un Cristo personal, el Hijo…” (Hebreos 1:1-3) 1MS h344.2
Balaam se sintió impulsado a predecir el nacimiento de Cristo y su gobierno. ¿cuándo será su gobierno?
En efecto Balaam dijo al rey de Moab: “Yo he hecho lo mejor para obtener tu favor y maldecir a Israel, pero Dios ha prevalecido. Israel ha ganado; tú y yo hemos perdido. Y aún más, déjame decirte lo que este pueblo hará a tu pueblo en los postreros días: El que tiene que regir a Israel herirá por todos lados a Moab, e Israel se portará varonilmente”.
Así fue como Balaam fue impelido a predecir el nacimiento de Cristo y Su reino, haciendo que Israel se porte varonilmente contra Moab y sus vecinos en los postreros días.
Cristo va a gobernar a través de su Iglesia (Reino) en los últimos días. ¿Se establecerá este Reino en su segunda venida o antes de su segunda venida?
“… una piedra fue cortada, no con mano, e hirió a la imagen en sus pies … Mas la piedra que hirió a la imagen fue hecha un gran monte que llenó toda la tierra … Y en los días de estos reyes el Dios del cielo levantará un reino … el cual desmenuzará y consumirá a todos estos reinos, pero él permanecerá para siempre, de la manera que viste que del monte fue cortada una piedra, no con mano, la cual desmenuzó el hierro, el bronce, el barro, la plata y el oro. El gran Dios ha mostrado al rey lo que ha de acontecer en lo por venir; y el sueño es verdadero, y fiel su interpretación”. Daniel 2:34, 35, 44, 45.
¿Qué hiere la imagen? ¿No es la piedra que Daniel revela que es simbólica del Reino de Dios restaurado? También mantenga en mente el hecho que la imagen no es herida por la piedra hasta después que ésta (la piedra) es cortada del monte, sin mano, y después crece y llena toda la tierra, viniendo así a ser una montaña por sí misma. En explanación de esta verdad, el profeta Isaías agrega:
“Acontecerá en lo postrero de los tiempos, que será confirmado el monte de la casa de Jehová como cabeza de los montes, y será exaltado sobre los collados, y correrán a él todas las naciones. Y vendrán muchos pueblos, y dirán: Venid, y subamos al monte de Jehová, a la casa del Dios de Jacob; y nos enseñará sus caminos, y caminaremos por sus sendas. Porque de Sion saldrá la ley, y de Jerusalén la palabra de Jehová”. Isaías 2:2-3.
Así como la piedra, cortada de un monte sobrenaturalmente, sobrenaturalmente se convierte en otro monte, luego llena toda la tierra, revela el proceso de la profecía volviéndose historia; que la piedra (en eso crecerá) es símbolo de los primeros frutos en el reino; que el reino naciente comienza con los 144.000 “siervos de Dios”(Apocalipsis 7:3); que consecuentemente la iglesia de Laodicea (en eso es la última en la cual el trigo y la cizaña están mezcladas, y por consecuente en la que el trigo, los 144.000 los primeros frutos, es cosechado) necesariamente es el monte de la cual la piedra, los primeros frutos del reino, es cortada o quitada.
Además, se ve que al ser “cortada sin mano”, sin ayuda humana, obviamente muestra el hecho que ellos son juntados por los ángeles; que su aumento, entonces, como lo revela el crecimiento de la piedra, es el resultado subsecuentemente de la congregación de los segundos frutos de todas las naciones, haciendo que el monte o reino, llene la tierra; y que esta obra sobrenatural de cortar la piedra, de separar los 144.000, el núcleo del reino, es la purificación de la iglesia.
Finalmente, desde que la piedra es cortada, como se ha visto, el reino naciente es establecido –“en los días de estos reyes” (los reyes de los dedos), no después de sus días, y puesto que los 144.000 “siervos de Dios” están sobre el monte de Sion (Apocalipsis 14:1), resulta conclusivamente que la piedra reino en su comienzo es establecido en la Tierra Santa, mientras los reyes de los dedos están todavía en existencia.
Indiscutible, entonces los 144.000 siervos de Dios sin engaño (Apocalipsis 14:5), que componen el gobierno de Dios en su comienzo, la piedra que hiere la imagen, y que subsecuentemente se hace un gran monte que llena toda la tierra, son los instrumentos en la eventual destrucción de todos los gobiernos terrenales. Consecuentemente, entonces, de quien más en ese tiempo en todo el mundo, de quien más verdaderamente sino de ellos mismos, pudo escribirse:
“… porque son varones maravillosos … un pueblo grande y fuerte; semejante a él no lo hubo jamás, ni después de él lo habrá en años de muchas generaciones”. Zacarías 3:8; Joel 2:2.
“El remanente de Jacob será en medio de muchos pueblos como el rocío de Jehová, como las lluvias sobre la hierba, las cuales no esperan a varón, ni aguardan a hijos de hombres … Tu mano se alzará sobre tus enemigos, y todos tus adversarios serán destruidos … No es como ellos la porción de Jacob; porque él es el Formador de todo, e Israel es el cetro de su herencia; Jehová de los ejércitos es su nombre. Martillo me sois, y armas de guerra; y por medio de ti quebrantaré naciones, y por medio de ti destruiré reinos. Por tu medio quebrantaré caballos y a sus jinetes, y por medio de ti quebrantaré carros y a los que en ellos suben. Asimismo, por tu medio quebrantaré hombres y mujeres, y por medio de ti quebrantaré viejos y jóvenes, y por tu medio quebrantaré jóvenes y vírgenes. También quebrantaré por medio de ti al pastor y a su rebaño; quebrantaré por tu medio a labradores y a sus yuntas; a jefes y a príncipes quebrantaré por medio de ti”. Miqueas 5:7, 9; Jeremías 51:19-23.
Quien se atrevería a preguntar en que profecía éstos son el pueblo y esta es la iglesia que termina la obra - el único pueblo y la única iglesia que poseerá todos los dones del espíritu, desde el don de profecía hasta el don de gobierno y el don de milagros; que estos dones les son dados por realizar su obra culminante de iluminar la tierra con gloria (Apocalipsis 18:1), de “predicar este evangelio del reino en todo el mundo por testimonio a todas las naciones”, juntando así el pueblo de Dios, los segundos frutos, libres de cizaña (“Mi pueblo”), fuera de Babilonia (Apocalipsis 18:4). De toda nación y linaje y lengua y pueblo (a quien gobierna Babilonia), ellos traen “a todos sus hermanos” a la iglesia purificada (Isaías 66:19, 20), el reino de Dios en la tierra en su naciente restauración.
En visionado proféticamente hace mucho tiempo este glorioso día de triunfo para el pueblo y la iglesia de Dios, y para el “evangelio eterno”, la Inspiración jubilosamente declara:
“… Se realizaron grandes milagros. Sanaban los enfermos, y señales y prodigios acompañaban a los creyentes. Dios colaboraba con la obra, y todos los santos, sin temor de las consecuencias, obedecían al convencimiento de su conciencia, se unían con los que guardaban todos los mandamientos de Dios y proclamaban poderosamente por doquiera el tercer mensaje …” Primeros Escritos, página 278.
“Y en aquellos días los hombres buscarán la muerte, pero no la hallarán; y ansiarán morir, pero la muerte huirá de ellos”. Apocalipsis 9:6.
“… Las espadas levantadas contra el pueblo de Dios se quebraron y cayeron tan inofensivas como briznas de paja …” Primeros Escritos, página 284.
¿Como son Dios y Cristo uno y, sin embargo, dos Personas distintas?
Dios es el Padre de Cristo; Cristo es el Hijo de Dios. A Cristo ha sido dada una posición exaltada. Ha sido hecho igual al Padre. Todos los consejos de Dios están abiertos para su Hijo. 3JT 266.2 - 3JT 266.3
Jesús dijo a los judíos: "Mi Padre hasta ahora obra, y yo obro.... No puede el Hijo hacer nada de sí mismo, sino lo que viere hacer al Padre: porque todo lo que él hace, esto también hace el Hijo juntamente. Porque el Padre ama al Hijo, y le muestra todas las cosas que él hace." Juan 5:17-20 3JT 266.4
Aquí, se recalca otra vez la personalidad del Padre y la del Hijo, y se demuestra la unidad que existe entre ellos. 3JT 267.1
Esta unidad se expresa también en el capítulo 17 de Juan, en la oración de Cristo por sus discípulos: 3JT 267.2
"Mas no ruego solamente por éstos, sino también por los que han de creer en mí por la palabra de ellos. Para que todos sean una cosa; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos sean en nosotros una cosa: para que el mundo crea que tú me enviaste. Y yo, la gloria que me diste les he dado; para que sean una cosa, como también nosotros somos una cosa. Yo en ellos, y tú en mí, para que sean consumadamente una cosa; y que el mundo conozca que tú me enviaste, y que los has amado, como también a mí me has amado." Juan 17:20-23. 3JT 267.2 - 3JT 267.3
¡Admirable declaración! La unidad que existe entre Cristo y sus discípulos no destruye la personalidad de ninguna de las partes. Son uno en propósito, en mente, en carácter, pero no en persona. Así es como Dios y Cristo son uno. ... 3JT 267.3 - 3JT 267.4
La relación entre el Padre y el Hijo, y la personalidad de ambos, se hacen claras en esta escritura también: : 8T 281
“Así ha hablado Jehová de los ejércitos, diciendo: He aquí el varón cuyo nombre es el Renuevo, el cual brotará de sus raíces, y edificará el templo de Jehová, y él llevará gloria, y se sentará y dominará en su trono, y habrá sacerdote a su lado; y consejo de paz habrá entre ambos”. Zacarías 6:12, 13 8T 281
La gloria de Dios brilló en el rostro de Jesús. ¿Cuándo brillara esta gloria en los rostros del pueblo de Dios?
Pronto oímos la voz de Dios, semejante al ruido de muchas aguas, que nos anunció el día y la hora de la venida de Jesús. Los 144.000 santos vivientes reconocieron y entendieron la voz; pero los malvados se figuraron que era fragor de truenos y de terremoto. Cuando Dios señaló el tiempo, derramó sobre nosotros el Espíritu Santo, y nuestros semblantes se iluminaron refulgentemente con la gloria de Dios, como le sucedió a Moisés al bajar del Sinaí. P.E. pág. 14
“Levántate, resplandece; porque ha venido tu luz, y la gloria de Jehová ha nacido sobre ti”. Isaías 60:1.
¿Quién puede decir con certeza que nuestra luz no ha venido? ¿Qué este mensaje no es la Verdad presente? Estoy seguro que ninguno de los que están en contacto con ella puedan decir tal cosa. La Inspiración, por eso, invita al pueblo de Dios, la Denominación, junto con nosotros, para levantarnos y resplandecer. La palabra “resplandecer’ es lo que debemos estudiar a continuación para saber lo que se exige de nosotros.
Un objeto oscuro y sucio nunca refleja, ni nunca resplandece sino absorbe para sí toda la luz que recibe. La luna resplandece porque su superficie es de blanca sustancia. Si estuviera formada de materia oscura, no reflejaría nada de luz. Esta misma verdad es aplicable a la luz espiritual. Si nosotros estamos deseosos de resplandecer, debemos levantarnos ahora mismo, y limpiarnos; y despojarnos de nuestros negros e inmundos vestidos, - participar activamente en este reavivamiento y reforma bajo la supervisión del Espíritu Santo. La necedad, el fanatismo, y la indiferencia debe abandonarse y el pensamiento Divino puesto en acción, como manda el Señor:
“Deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar. Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos. Porque como desciende de los cielos la lluvia y la nieve, y no vuelve allá, sino que riega la tierra, y la hace germinar y producir, y da semilla al que siembra, y pan al que come, así será mi palabra que sale de mi boca; no volverá a mí vacía, sino que hará lo que yo quiero, y será prosperada en aquello para que la envié”. Isaías 55:7-11.
Debemos ser limpios en nuestros pensamientos, en nuestras costumbres, en nuestros cuerpos y ropa, dentro y fuera de nuestra casa. La limpieza es Santidad; el gobierno de Dios es ley y orden, paz y justicia, gozo y alegría. Así que nosotros tenemos que ser pulidos por el Espíritu de Dios, ser cristianos en un todo si vamos a brillar es que jamás hemos de reflejar la Palabra de Dios a los que están sentados en las tinieblas. Si usted ha tomado el cuidado de todas las cosas que el mensaje enseña, luego como su deber supremo y privilegio Divino, tome lo que la Inspiración dice: “Levántate, resplandece; porque ha venido tu luz, y la gloria de Jehová ha nacido sobre ti”. Aquellos que ahora están sentados como objetos oscuros consumiendo la luz para sí mismos deben ahora abrazar la oportunidad y dar la bienvenida a este privilegio. Hoy es su oportunidad.
Isaías 60:2 - “Porque he aquí que tinieblas cubrirán la tierra, y grandes tinieblas las naciones; más sobre ti amanecerá El Señor, y sobre ti será vista su gloria”.
La frase “he aquí”, connota la idea de que, si se mira, podría ver las señales de tinieblas ya cerniendo alrededor. “Grandes tinieblas” significa que la gente estará completamente perdida, sin saber a donde ir, estarán completamente confundidas y perplejas. Ahora es nuestra oportunidad para responder a la llamada del Señor, y estar listos para hacer frente a la situación; Debemos entender completamente, que en realidad somos llamados a ser la luz a la Denominación, y ¡últimamente al mundo! ¡Maravilloso en realidad es que hayamos sido escogidos de entre las grandes masas del mundo! No se puede faltar este grande privilegio. Actúe ahora.
Isaías 60:3 - “Y andarán las naciones a tu luz, y los reyes al resplandor de tu levantamiento”.
Nosotros somos ahora el pueblo más oscuro del mundo, pero el día ya está en que seremos bien conocidos. Esta es la promesa segura, de que si nos levantamos de nuestros asientos y hacemos el esfuerzo para alcanzar el gran propósito de Dios para nosotros, los resultados serán que los Gentiles se levantarán y vendrán a nuestra luz y los reyes vendrán al resplandor de nuestro nacimiento. Esto es el día aceptable para usted.
Isaías 60:4 - “Alza tus ojos alrededor y mira, todos éstos se han juntado, vinieron a ti; tus hijos vendrán de lejos, y tus hijas serán llevadas en brazos”.
Aun ahora si levantamos nuestros ojos espirituales, dice el Señor, veremos que todas las cosas están listas. La llamada, juntamente con las señales de los tiempos, es demasiado clara para que se imagine que el día aun está lejano. Nuestros hijos e hijas en este mensaje pronto nos han de ser recogidos de todos los cabos de la tierra.
Isaías 60:5 - “Entonces verás, y resplandecerás; se maravillará y ensanchará tu corazón, porque se haya vuelto a ti la multitud del mar, y las riquezas de las naciones hayan venido a ti”.
When this comes to pass, then the remnant shall plainly see and flow together, the abundance of the wealth of the Gentiles shall be turned over to them.
Isaías 60:6-9 - “Multitud de camellos te cubrirá; dromedarios de Madián y de Efa; vendrán todos los de Sabá; traerán oro e incienso, y publicarán alabanzas de Jehová. Todo el ganado de Cedar será juntado para ti; carneros de Nebaiot te serán servidos; serán ofrecidos con agrado sobre mi altar, y glorificaré la casa de mi gloria. ¿Quiénes son éstos que vuelan como nubes, y como palomas a sus ventanas? Ciertamente a mí esperarán los de la costa, y las naves de Tarsis desde el principio, para traer tus hijos de lejos, su plata y su oro con ellos, al nombre de Jehová tu Dios, y al Santo de Israel, que te ha glorificado”.
Nuestros hijos e hijas en la fe vendrán como tempestad por el aire y por el mar. Ellos vendrán porque el Señor glorificará a todo Su pueblo. La llamada, “Salid de ella, pueblo mío, para que no seáis partícipes de sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas” Apocalipsis 18:4, sin duda, junto con la riqueza de los Gentiles, “una gran multitud, la cual nadie podía contar”. Apocalipsis 7:9.
Aunque el Antiguo Testamento señala a Dios como el Creador, Cristo creó el universo, incluyendo el mundo y su naturaleza. ¿Como podemos diferenciar entre la naturaleza y la naturaleza de Dios?
Hebreos 1:1,2 revela que Cristo no sólo es nuestro salvador sino también nuestro creador; que él no solamente creó nuestro mundo sino todos los otros mundos también; y que él es uno con el Padre. Es por esta razón que “Dios (el Padre) dijo (al hijo), Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza” - Génesis 1:26. Y mientras el Movimiento del Éxodo estaba a pie, “todos bebieron la misma bebida espiritual; porque bebían de la roca espiritual que los seguía, y la roca era Cristo”. 1ª Corintios 10:4.
Los que tienen un verdadero conocimiento de Dios no se infatuarán con las leyes de la materia ni las operaciones de la naturaleza, al punto de pasar por alto o rehusar reconocer la continua operación de Dios en la naturaleza. La naturaleza no es Dios, ni nunca lo fue. La voz de la naturaleza testifica de Dios, pero la naturaleza no es Dios. Como obra creada por Dios, simplemente da un testimonio del poder de Dios. La Deidad es el autor de la naturaleza. En sí mismo, el mundo natural no tiene poder sino el que Dios le suministra. Hay un Dios personal, el Padre; hay un Cristo personal, el Hijo. Y “Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por los profetas, en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo; el cual, siendo el resplandor de su gloria, y la imagen misma de su sustancia, y quien sustenta todas las cosas con la palabra de su poder, habiendo efectuado la purificación de nuestros pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas”. Hebreos 1:1-3 1MS pág. 344
“The psalmist says: “The heavens declare the glory of God; and the firmament sheweth his handywork. Day unto day uttereth speech, and night unto night sheweth knowledge. There is no speech nor language, where their voice is not heard” (Psalm 19:1-3). Some may suppose that these grand things in the natural world are God. They are not God. All these wonders in the heavens are only doing the work appointed them. They are the Lord's agencies. God is the superintendent, as well as the Creator, of all things. The Divine Being is engaged in upholding the things that He has created. The same hand that holds the mountains and balances them in position, guides the worlds in their mysterious march around the sun.” 1SM 293.2
¿Como es posible que Cristo sea el hijo de Dios y aún ser Dios?
“Y nosotros también os anunciamos el evangelio—continuó el apóstol, —de aquella promesa que fue hecha a los padres, la cual Dios ha cumplido a los hijos de ellos, a nosotros, resucitando a Jesús: como también en el salmo segundo está escrito: Mi hijo eres tú, yo te he engendrado hoy. Y que le levantó de los muertos para nunca más volver a corrupción, así lo dijo: Os daré las misericordias fieles de David. Por eso dice también en otro lugar: No permitirás que tu Santo vea corrupción. Porque a la verdad David, habiendo servido en su edad a la voluntad de Dios, durmió, y fué juntado con sus padres, y vio corrupción. Mas aquel que Dios levantó, no vió corrupción.” HAp. pág. 139
Las Escrituras indican con claridad la relación entre Dios y Cristo, y manifiestan con no menos claridad la personalidad y la individualidad de cada uno de ellos. MC pág. 329
“Dios, habiendo hablado muchas veces y en muchas maneras en otro tiempo a los padres por los profetas, en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, ... el cual siendo el resplandor de su gloria, y la misma imagen de su sustancia, y sustentando todas las cosas con la palabra de su potencia, habiendo hecho la purgación de nuestros pecados por sí mismo, se sentó a la diestra de la majestad en las alturas, hecho tanto más excelente que los ángeles, cuanto alcanzó por herencia más excelente nombre que ellos. Porque ¿a cuál de los ángeles dijo Dios jamás: MC pág. 329
“Thou art My Son, This day have I begotten Thee? MH 421.4
And again, MH 421.5 I will be to Him a Father, And He shall be to Me a Son?” Hebrews 1:1-5. MH 421.6
Habiendo asumido la humanidad, Cristo llegó a ser uno con la humanidad y, al mismo tiempo reveló el Padre a los seres humanos pecaminosos. Era semejante a sus hermanos en todo. Fue hecho carne, igual que nosotros. Le daba hambre y sed y se cansaba. Se sostenía comiendo y se refrescaba durmiendo. Se hermanó con los hombres, y, sin embargo, era el inmaculado Hijo de Dios. Fue un peregrino y advenedizo en la tierra, estaba en el mundo, pero no era del mundo; tentado y probado como los hombres y mujeres son tentados y probados, pero viviendo una vida libre de pecado. Tierno, compasivo, comprensivo, siempre amable con los demás, representaba el carácter de Dios, y estaba continuamente empeñado en el servicio hacia Dios y los hombres. 8TPI pág. 301