“Así que, por cuanto los hijos participaron de carne y sangre, él también participó de lo mismo, para destruir por medio de la muerte al que tenía el imperio de la muerte, esto es, al diablo” KJV — Hebreos 2:14
“ Admirable combinación del hombre y Dios! .. El se humillo a si mismo a la naturaleza humana. El hizo esto para que se cumpliera la escritura; y el plan fue iniciado por el Hijo de Dios, sabiendo todos los pasos en su humillación, así descendió a hacer la expiación por los pecados de los condenados, del mundo que gemía. Que humildad fue esta. Asombro a los ángeles. La lengua nunca podrá describirlo; la imaginación no puede asimilarlo. El Verbo eterno consintió en hacerse carne! ¡Dios se hizo hombre! Fue una humildad maravillosa. AFC 68.2”
“Pero Él dio un paso aún más bajo; el Hombre debe humillarse como hombre para soportar el insulto, el reproche, las acusaciones vergonzosas y el abuso. No parecía haber un lugar seguro para Él en Su propio territorio. Tuvo que huir de un lugar a otro para salvar su vida. Fue traicionado por uno de sus discípulos; Fue negado por uno de sus seguidores más celosos. Fue burlado. Fue coronado con una corona de espinas. Fue flagelado. Fue obligado a llevar el peso de la cruz.“ AFC 68.3
“No era insensible a este desprecio e ignominia. Se sometió, pero, ¡oh! Sintió la amargura como ningún otro ser podría sentirla. ¡Él era puro, santo e inmaculado, pero acusado como un criminal!. El adorable Redentor descendió de la más alta exaltación. Paso a paso se humilló a sí mismo para morir, pero ¡qué muerte! Fue lo más vergonzoso, lo más cruel: la muerte en la cruz como malhechor. No murió como un héroe a los ojos del mundo, cargado de honores, como hombres en batalla. Murió como un criminal condenado, suspendido entre los cielos y la tierra, ¡murió una muerte prolongada de vergüenza, expuesto a las burlas y vituperios de una multitud depravada, degradada y cargada de crímenes!...” AFC 68.4
“Toda esta humillación de la majestad de los cielos fue por culpa de la condenación del hombre Él fue más y más bajo en Su humillación, hasta que no hubo profundidades más bajas que Él pudiera alcanzar, en orden para levantar al hombre de su corrupción moral. Todo esto fue por ti.” S.D.A Comentario de la Biblia AFC 68.5
Cuán importante fue la misión de Cristo para redimir nuestro mundo?
“ Y entonces apareció en el cielo una gran señal: una mujer vestida del sol, con la luna debajo de sus pies, y sobre su cabeza una corona de doce estrellas. Y estando encinta, clamaba con dolores de parto, en la angustia del alumbramiento. Y también apareció otra señal en el cielo: he aquí un gran dragón escarlata, que tenía siete cabezas y diez cuernos, y en sus cabezas siete diademas; y su cola arrastraba la tercera parte de las estrellas del cielo, y las arrojó sobre la tierra. Y el dragón se paró frente a la mujer que estaba para dar a luz, a fin de devorar a su hijo tan pronto como naciese. Y ella dio a luz un hijo varón, que regirá con vara de hierro a todas las naciones; y su hijo fue arrebatado para Dios y para su trono.” KJV ---- Apocalipsis 12: 1-5
Cuando la promesa de la venida del salvador fue hecha, fue entonces que el dragón aprendió que la iglesia iba a dar a luz al “niño barón” y desde entonces el vio atentamente, esperando para destruir al redentor del mundo tan pronto cuando el naciera. Esto es lo que intento a través de Herodes, cuando el causo el asesinato de una multitud de niños pequeños. El niño Cristo, sin embargo, escapo, y el diablo conoció su primera derrota en esta encrucijada.”
Ahora el dragón se había fortificado con las siete cabezas y los diez cuernos, denota que en un día el controlara todo el poder civil y religioso (para el numero simbólico “diez” denota universalidad, tal como los diez dedos de los pies de Daniel 2, los diez cuernos de las otras bestias bíblicas, y las diez vírgenes de Mateo 25)
Los cuernos representan todo el poder civil, mientras que la cabeza representa todo el poder religioso, para el numero bíblico “siete” denota que es algo completo, es mas el hecho de que la iglesia (los judíos), la única agencia a través de la cual Dios preparó hasta entonces, crucificaron al Señor, esto en sí mismo es prueba suficiente de que la Iglesia había apostatado, que ella había llegado a ser la séptima cabeza del dragón, y que así estaba el Dragón armado con diez cuernos y siete cabezas, – con todo el poder civil y religioso. Y, entonces se vera, el dragón con sus cuernos y cabezas representando al mundo capturando por el diablo.
Por lo tanto, esto lo que el mundo perdió en ese día, y así fue como Cristo vino a redimirla. Para hacer todo esto El comenzó una nueva organización de la iglesia. Bajo esta luz vemos a Cristo, el Redentor del mundo, y Su misión es aún más importante que nunca antes.
Es un hecho reconocido, también, que las coronas siempre representan la autoridad real. Y como ellas aparecen en la cabeza del dragón, no en sus cuernos, es especialmente notable que mientras el dragón reinaba ambos el mundo civil y religioso, sin embargo el corono el religioso.
En otras palabras, la iglesia sostuvo el cetro; la iglesia se sentó en el trono del dragón. Y el hecho de que el numero de los cuernos del dragón representa universalidad y el numero de sus cabezas coronadas, algo completo, junto con el hecho de que ambos la iglesia judía y la romana persiguieron al señor, muestra que el dragón en su conjunto representa un mundo satánico-eclesiástico completo, que Satanás había llevado cautivo al mundo. Como vencedor de ella y armado con cuernos y cabezas, instó a Herodes a matar a los niños recién nacidos tan pronto como supo del nacimiento de Cristo. Esto lo hizo con la esperanza de destruir al Salvador, devorar al niño y así perpetuar su propio reino. Tal era la condición del mundo en el primer advenimiento de Cristo, y así la iglesia pudo crucificar al Señor, apedrear a Esteban, decapitar a otros y, sin embargo, escapar de los castigos de las autoridades civiles.
Por esta misma razón el hijo del hombre, el redentor del mundo, vino justo cuando lo hizo. El dragón aun así, para defender su dominio satánico, pacientemente espero y cuidadosamente miro la venida del redentor prometido al mundo. Así fue que mientras la eterna iglesia de Dios estaba encinta y clamaba por ser liberada, el dragón con sus siete cabezas coronadas y sus diez cuernos estaba listo para devorar al niño tan pronto como naciera.
Como tal apostasía agarro el mundo en los días de Noé, también, lo hizo necesario para que el Señor hiciera algo para salvar el mundo. Por el bien de la humanidad, el Creador envió el diluvio para llevar a un fin a la maldad. En alguna manera la terrible apostasía de los judíos en los días de la primera venida de Cristo, reclamo otro desastre tan completamente destructivo como el terrible diluvio para borrar nuevamente la maldad. Pero, si por la única razón de cumplir Su promesa infalible a Su fiel siervo Noé, Dios no podría inundar al mundo por segunda vez. Y entonces, El envió a Su hijo a morir en lugar del mundo. En esta luz, cuanto mas brillante que nunca se destaca la misión del Redentor! Por su muerte en verdad salvó al mundo de la destrucción en ese tiempo, y por Su resurrección hizo posible para que subsistamos hoy.
Porque la gente se avergüenza de estar en la compañía de los seguidores de Jesús?
Jesús fue confrontado por el joven rico, quien le dijo: He guardado los mandamientos. ¿Qué debo hacer todavía para entrar en la vida eterna? Aquí sigue la respuesta:
“ Ahora cuando Jesús oyó estas cosas, El le dijo, Aún te falta una cosa: vende todo lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme.” KJV — Lucas 18:22
Para entender esta escritura, nosotros debemos leer otra junto a ella :
“Había un hombre de los fariseos que se llamaba Nicodemo, un líder de los judíos. Este vino a Jesús de noche, y le dijo: Rabí, sabemos que has venido de Dios como maestro; porque nadie puede hacer estas señales que tú haces, si no está Dios con él. Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios.” KJV — Juan 3 1:3
Ambos el joven rico y Nicodemo eran lideres, aunque Nicodemo no podría haber sido tan rico como el joven, el sin embargo no era pobre. Pero porque a uno le pidió que diese sus riquezas a los pobres, y al otro le dijo que naciese de nuevo? Porque no pagaron el mismo precio para la salvación? Aquí están las razones:
Para evitar ser visto en la compañía de Jesús, Nicodemo vino a El, no de día, sino secretamente por la noche, mientras que el joven rico vino a Jesús no solo abiertamente a pleno día, sino también mientras una multitud estaba con Jesús. El obstáculo básico del joven rico, por lo tanto, era su riqueza, y el obstáculo básico de Nicodemo era su orgullo. Claramente, entonces, la dolencia de uno requería un tipo de tratamiento, y la dolencia del otro requería otro tipo de tratamiento.
Jesús nunca le pidió a nadie que adoptase su religión, pero el pidió que lo “siguieran” a Él, para ser uno de sus discípulos. El joven rico no podía seguir al Señor porque su corazón estaba centrado en sus propias riquezas. Y Nicodemo no podía seguir al Señor porque era demasiado orgulloso para ser visto en la compañía del impopular y odiado Jesús seguido por humildes pescadores. Para eliminar los obstáculos, uno tenía que deshacerse de sus riquezas y el otro tenía que deshacerse de su orgullo. Para erradicar el orgullo, uno debe nacer de nuevo, debe convertirse en un hombre nuevo. Pero para erradicar el amor al dinero hay que dar su dinero a quienes realmente lo necesitan.
Las escrituras llevan registro que Abraham fue muy rico. Y todavía fue llamado “ amigo de Dios “ Las riquezas en sí mismas, por lo tanto, pueden ser una bendición, aunque más a menudo se convierten en una maldición. El orgullo, sin embargo, nunca es bueno.
Recuerda que el Diablo encuentra en cada uno de nosotros al menos un defecto. Cualquiera que sea ese defecto, debe eliminarse, ya sea la riqueza o el orgullo. Por supuesto, no todos son ricos y están atados a su riqueza, pero todos pueden estar atados a sí mismos, al “viejo hombre ”. Y no todos necesitan renunciar a las riquezas, sino que todos deben liberarse del “viejo hombre” que los mete en todo menos en lo que deberían estar.
El reconocimiento de Nicodemo que Jesús era el Hijo de Dios hizo su caso extremadamente malo. Sabiendo quien era Jesús, el no debería haberse sentido avergonzado de que lo hubiesen visto en su compañía, no debería haberse visto asustado de sus enemigos. El debería haber considerado el privilegio de estar asociado con el Hijo de Dios, con un Ser Celestial. Pero como Nicodemo se avergonzaba de ser visto con Él, y se enorgullecía de estar con los fariseos, necesitaba enterrar al “viejo hombre”, y renacer a una nueva vida, necesitaba nacer de nuevo.
“¿Quién oyó cosa semejante?, ¿quién vio tal cosa? ¿Concebirá la tierra en un día? ¿Nacerá una nación de una vez? Pues en cuanto Sion estuvo de parto, dio a luz sus hijos.” KJV — Isaías 66:8
Aunque la iglesia judía en los días de Jesús no sufrió dolores de parto, ¡sin embargo dio a luz al Hijo de Dios! Pero cuando Sion da a luz, da a luz a todos sus hijos a la vez, ¡una nación entera! Un milagro en cada caso.
Como puede Sion tener dolores de parto?, Volvamos al reino natural: en la naturaleza, la madre lleva al niño, entonces los dolores de parto y da a luz. ¿De qué otra manera, entonces, en el ámbito espiritual puede Sión sufrir dolores de parto sin llevar primero a sus hijos antes de que nazcan? Para ser específico, cuando uno se une a la iglesia, ella está embarazada de él, por así decirlo. Cuando ella esté gestando así a sus hijos, entonces todos ellos nacerán a la vez, todos ellos a la vez recibirán su segundo nacimiento, el nacimiento aquí mencionado.
Y como la inspiración lo aclara ellos deben nacer de nuevo, todos al principio están en el mismo estado mental que Nicodemo: avergonzados de ser vistos en la compañía de los creyentes de la Verdad presente, avergonzados de estar asociados con creyentes de la Verdad impopular.
En 1 de Corintios 15:50 nos dice que ““carne y sangre no pueden heredarse en el reino de Dios.” ¿Cómo se establecerá el reino de Dios sin “carne ni sangre”?
“El gobierno bajo el cual vivió Jesús era corrupto y opresivo; por todas partes había abusos clamorosos: extorsión, intolerancia y crueldad aplastante. Sin embargo, el Salvador no intentó ninguna reforma civil. No atacó los abusos nacionales, ni condenó a los enemigos nacionales. No interfirió con la autoridad o la administración de los que estaban en el poder. El que fue nuestro ejemplo se mantuvo apartado de los gobiernos terrenales. No porque fuera indiferente a los males de los hombres, sino porque el remedio no residía en medidas meramente humanas y externas. Para ser eficaz, la cura debe llegar a los hombres individualmente y debe regenerar el corazón.” DTG 509.3
“ No por las decisiones de las cortes o concilios o asambleas legislativas, no por el patrocinio de los grandes hombres del mundo, se establece el reino de Cristo, sino por la implantación de la naturaleza de Cristo en la humanidad a través de la obra del Espíritu Santo. “A todos los que le recibieron, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios, a los que creen en su nombre; los cuales no nacieron de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de hombre. , sino de Dios.” Juan 1:12, 13 . Aquí está el único poder que puede obrar la elevación de la humanidad. Y la agencia humana para la realización de esta obra es la enseñanza y práctica de la palabra de Dios.
Jer. 31:31-34 - “ He aquí que vienen días, dice el Señor, en los cuales haré nuevo pacto con la casa de Israel y con la casa de Judá. No como el pacto que hice con sus padres el día que tomé su mano para sacarlos de la tierra de Egipto; porque ellos invalidaron mi pacto, aunque fui yo un marido para ellos, dice el Señor. Pero este es el pacto que haré con la casa de Israel después de aquellos días, dice el Señor: Daré mi ley en su mente, y la escribiré en su corazón; y yo seré a ellos por Dios, y ellos me serán por pueblo. Y no enseñará más ninguno a su prójimo, ni ninguno a su hermano, diciendo: Conoce al Señor; porque todos me conocerán, desde el más pequeño de ellos hasta el más grande, dice el Señor; porque perdonaré la maldad de ellos, y no me acordaré más de su pecado.”
Aquí esta una promesa de un nuevo pacto, No es el tipo que Dios hizo con nuestros predecesores el día que salieron de Egipto, el día en que escribió los mandamientos en tablas de piedra y así para que se guardasen. En cambio, Él hace un nuevo pacto, un pacto para escribirlos en nuestros corazones. Entonces cada uno de nosotros lo conocerá sin necesidad de ser enseñado.
Ten en cuenta, pese a esto, El no va a hacer una nueva ley, sino un nuevo pacto, un nuevo contrato para guardar la ley. La diferencia es que en lugar de escribir la ley en tablas de piedra, la escribirá en las tablas de carne del corazón, el asiento que ahora ocupa la ley del pecado.
Este pacto, como ven, debe hacerse tanto con la casa de Israel como con la casa de Judá, con todo el pueblo de Dios.
La escritura, recuerda, dice que no se puede guardar la ley mientras este escrita en las tablas de piedra, pero definitivamente dice que se puede, por aquellos que han roto la ley son reprobados por hacerlo. Nosotros podemos, por lo tanto, incluso ahora guardan in convenientemente los mandamientos aunque todavía estén escritos en piedra. Por conveniencia, la mayoría de los cristianos desea que la ley sea abolida, y algunos se hacen creer que ha sido abolida, aunque la única ley que ha sido abolida es la ley ceremonial, la de los sacrificios, la sombra del Cordero de Dios.
Que diferencia hay entre la ley que esta escrita en piedra, y la de nuestros corazones? – La experiencia de Nabucodonosor, rey de Babilonia revela la respuesta.
Si el rey hubiera sido forzado a vivir con el ganado, en un establo o en un campo, se habría suicidado si hubiera sido posible. Pero tan pronto como Dios le quitó su corazón humano y puso en él el corazón de un buey, el rey estuvo perfectamente contento de estar con el ganado y completamente descontento de vivir en su palacio.
Si se hiciera lo mismo con cualquiera de nosotros, nuestros deseos serían los mismos que los del rey. De la misma manera, cuando el corazón de piedra sea quitado de nosotros, y el corazón de carne con la ley de Dios escrita en él sea puesto en nosotros, entonces encontraremos que es imposible pecar, y muy deleitable guardar los mandamientos de Dios. Y por eso no deben temer tener que luchar para guardar la ley de Dios en el Reino, como lo haces aquí. Entonces estarás perfectamente satisfecho de vivir una vida sin pecado. De hecho, no desearás pecar más de lo que desearías morir ahora.
Ciertamente maravilloso, pero cuando esperamos que este milagro tome lugar? Para buscar la respuesta, necesitamos conectar la profecía de Jeremías con la profecía de Ezequiel del mismo evento:
Jer. 31:8-- “ He aquí yo los hago volver de la tierra del norte, y los reuniré de los fines de la tierra, y entre ellos ciegos y cojos, la mujer que está encinta y la que dio a luz juntamente; en gran compañía volverán acá”
Ezeq. 36:24:28 – “Y yo os tomaré de las naciones, y os recogeré de todas las tierras, y os traeré a vuestro país. Esparciré sobre vosotros agua limpia, y seréis limpiados de todas vuestras inmundicias; y de todos vuestros ídolos os limpiaré. Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne. Y pondré dentro de vosotros mi Espíritu, y haré que andéis en mis estatutos, y guardéis mis preceptos, y los pongáis por obra. Habitaréis en la tierra que di a vuestros padres, y vosotros me seréis por pueblo, y yo seré a vosotros por Dios.
Lo registrado de ambas profecías denota claramente el tiempo en el cual este milagro se realizara en los corazones del pueblo de Dios. Ambos profetas lo hacen lo mas claro que pueden, este cambio de corazones toma lugar en la tierra santa, Palestina, al comienzo del reino que Dios promete establecer “en los días de estos reyes” (Daniel 2:44), no después de sus días. Además, dice que nos tomará de entre las naciones y nos reunirá de todos los países y nos llevará a nuestra propia tierra (Ezequiel 36:24), la tierra en la que habitaron nuestros padres (Ezequiel 36:28). “Entonces”, en ese momento, dice la Inspiración, no antes, rociará sobre nosotros agua limpia, nos limpiará de toda inmundicia y de todos los ídolos. Además, Él entonces pondrá en nosotros un corazón nuevo (Ezequiel 36:26). Él nos dará Su Espíritu y nos hará cumplir Sus estatutos y guardar Sus juicios (Ezequiel 36:27). Lee estas escrituras por ti mismo y ve si dicen todo lo que estoy tratando de decirte que dicen.
Cristo se hizo “perfecto por medio de los sufrimientos”. ¿Cómo y cuándo seremos perfectos?
“Todo esto pudo ser porque Cristo se apoderó de la naturaleza del hombre, y participó de los atributos divinos, y plantó Su cruz entre la humanidad y la divinidad, salvando el abismo que separaba al pecador de Dios.”1MS 261.1
“Porque en verdad no tomó sobre sí la naturaleza de los ángeles; pero tomó sobre sí la simiente de Abraham. Por lo cual debía ser en todo semejante a sus hermanos, para ser misericordioso y fiel sumo sacerdote en lo que a Dios se refiere, para expiar los pecados del pueblo. Porque en cuanto él mismo padeció siendo tentado, es poderoso para socorrer a los que son tentados” ( Hebreos 2:16-18 ). 1MS 261.2
“Jesús vino a traer el poder moral para combinarlo con el esfuerzo humano, y en ningún caso sus seguidores deben permitirse perder de vista a Cristo, quien es su ejemplo en todas las cosas. Él dijo: “Por ellos yo me santifico a mí mismo, para que también ellos sean santificados en la verdad” ( Juan 17:19 ). Jesús presenta la verdad ante sus hijos para que la miren y, al contemplarla, sean transformados, siendo transformados por su gracia de la transgresión a la obediencia, de la impureza a la pureza, del pecado a la santidad del corazón y la justicia de vida.”1MS 262.1
Ezeq. 36:23-28-- “Y santificaré mi grande nombre, profanado entre las naciones, el cual profanasteis vosotros en medio de ellas; y sabrán las naciones que yo soy el Señor, dice el Señor Dios, cuando sea santificado en vosotros delante de sus ojos. Y yo os tomaré de las naciones, y os recogeré de todas las tierras, y os traeré a vuestro país. Esparciré sobre vosotros agua limpia, y seréis limpiados de todas vuestras inmundicias; y de todos vuestros ídolos os limpiaré. Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne. Y pondré dentro de vosotros mi Espíritu, y haré que andéis en mis estatutos, y guardéis mis preceptos, y los pongáis por obra. Habitaréis en la tierra que di a vuestros padres, y vosotros me seréis por pueblo, y yo seré a vosotros por Dios.”
Aquí hay signos adicionales, signos de los cuales son mostrados dentro y fuera del hombre mismo: las cicatrices y los defectos que el pecado ha escrito en los cuerpos del pueblo de Dios son lavados; también, el corazón endurecido por el pecado es tallado en ellos y se establece un corazón nuevo y tierno que se deleita en guardar los estatutos y juicios de Dios.
Cuando todo esto tomara lugar? – después de que Dios toma a sus santos “ de entre las naciones” “de todos los países” y los llevara a su “propia tierra” dicen las escrituras. Así habitarán en la tierra que Dios en la antigüedad dio a sus padres, y así serán Su pueblo y Él, su Dios. Aquí ves que nadie puede encontrarse con Dios cara a cara y vivir con Él eternamente sin tener primero esta experiencia de limpieza corporal y cambio de corazón.
Como es ser como Jesús o Dios?
Zacarías 12:8 - “En aquel día el Señor defenderá al morador de Jerusalén; el que entre ellos fuere débil, en aquel tiempo será como David; y la casa de David como Dios, como el ángel del Señor delante de ellos. ”
Además nos da la garantía de que el Señor defenderá a su pueblo, la inspiración los compara con David y Dios. Aun los débiles “serán como David; y la casa de David será como Dios”, “como el ángel del Señor delante de ellos”. ¡Qué gran y maravillosa declaración! ¡Qué privilegio ser semejante a Dios mismo!
Ahora en orden para uno sepa que significa ser “ como David”, uno debe saber que tipo de persona era el antiguo David.
Para empezar, el era un pastor de primera, el arriesgo su vida por las ovejas. Recuerda que a fin de salvar al cordero el fue valientemente detrás de un león y oso y los mato con sus propias manos. Y para salvar la independencia de su nación y el gran honor de Dios, , en otra ocasión, volvió a arriesgar su vida enfrentándose valientemente al gigante Goliat. ¡Por la fidelidad de David, Dios lo libró de las bestias y de los gigantes y lo hizo rey sobre Su pueblo!
La fidelidad de una persona en las pequeñas cosas indica su fidelidad en las grandes cosas también, la fidelidad siempre trae crecimiento, entonces, para ser como David, uno debe ser tan fiel, tan confiable y tan celoso por el Reino de Dios como lo fue David en la antigüedad.
Ahora, para que sepamos lo que significa ser “como Dios” debemos estudiar como es Dios. Al principio el no solo creó y llenó abundantemente la tierra de todo bien para sus criaturas, sino que también plantó un jardín (hogar) para el hombre. Por lo tanto, hizo un hogar modelo para todos los seres humanos que vivirían después. Enseñó a Adán cómo mantener el hogar y cómo arreglar el jardín. Le enseñó a hablar y a discernir la naturaleza entre una bestia y otra, para nombrarlas en consecuencia. Dios dotó al hombre de conocimiento y vida para hacerlo feliz y útil para hacer del mundo lo que debería ser. Incluso después de que la santa pareja cayera en pecado, Dios todavía estaba interesado en ellos como lo estaba antes; tanto, de hecho, que inmediatamente comenzó a enseñarles cómo redimirse y regresar a su hogar eterno. Desde ese día hasta hoy Él continuó enseñando a la familia humana.
Para hacer esta obra salvadora Dios envió al espíritu de la verdad. El envió a los profetas y ángeles, también su propio hijo – todos maestros de la redención. El mismo descendió al Sinaí y aunque mataron a casi todos Sus siervos, incluido Su hijo, Su interés inquebrantable en la raza humana ha continuado hasta el día de hoy. A pesar de nuestras faltas, Su promesa de llevarnos de regreso al Edén para vivir allí con Él si nos arrepentimos, sigue siendo tan segura como el sol.
Ahora vemos como es Dios y si queremos ser “como Dios”, entonces también debemos ser así. Eso significa que debemos estar tan interesados los unos en los otros y en la edificación de Su Reino como Él está interesado. Debemos ser tan desinteresados como Él lo es. Con gusto debemos enseñar a otros todo lo que Él nos ha enseñado. Debemos hacer todo lo posible para mejorar las condiciones de vida de los demás. Debemos hacer que el mundo sea mejor de lo que podría ser si no estuviéramos en él. En la semana de la creación, Dios hizo su parte. Ahora debemos hacer nuestra parte de la creación si queremos ser como Dios.
Cualquier cosa buena que podamos tener, ya sea un oficio o algún otro don que valga la pena tener, debemos ser tan fieles en ello y tan ansiosos de enseñarlo a otros como Él es fiel y ansioso por enseñarnos a nosotros. Si descuidamos este deber, no solo dejaremos de ser como Dios, sino que incluso se nos pedirá que demos cuenta de nuestra negligencia.
A lo largo de mi vida me he encontrado con personas muy egoístas y temerosas de que alguien se les saca ventaja de una forma u otra.
El Señor enseño a los pájaros como vivir y como construir nidos y como criar a sus pequeños. Entonces no deberíamos nosotros ayudar a otros a construir y y mejorar sus casas y sus condiciones de vida?. Recordamos decir a Jesus“Cualquiera que dé de beber a uno de estos pequeños un vaso de agua fría solamente en nombre de discípulo, de cierto os digo, que de ningún modo perderá su recompensa.” Mateo. 10:42.
Si Dios no fuera lo que es, no sería Dios; y si continuamos como siempre fuimos, nunca seremos “como Dios”.
“En los tribunales de arriba, Cristo está intercediendo por Su iglesia, intercediendo por aquellos por quienes Él ha pagado la redención. precio de su sangre. Los siglos, las eras, nunca pueden disminuir la eficacia de Su sacrificio expiatorio. Ni la vida ni la muerte, ni la altura ni la profundidad, pueden separarnos del amor de Dios que es en Cristo Jesús; no porque lo sostengamos con tanta firmeza, sino porque Él nos sostiene con tanta fuerza. Si nuestra salvación dependiera de nuestros propios esfuerzos, no podríamos ser salvos; pero depende de Aquel que está detrás de todas las promesas. Nuestra comprensión de Él puede parecer débil, pero Su amor es el de un hermano mayor; mientras mantengamos nuestra unión con Él, nadie nos podrá arrebatar de Su mano. “ HAp 552.2